Operación “Promesa Verdadera III” incluyó más de 150 misiles balísticos; varias unidades alcanzaron edificios residenciales en Tel Aviv y causaron decenas de heridos.
El viernes por la noche, Irán lanzó una ofensiva masiva —denominada “Promesa Verdadera III”— contra Israel, utilizando más de 150 misiles balísticos y más de 100 drones como represalia a ataques israelíes a instalaciones nucleares en Irán. A pesar de la intervención del sistema antiaéreo israelí en capas, conocido como Iron Dome, algunos proyectiles penetraron y alcanzaron zonas urbanas clave, entre ellas Tel Aviv.
Según autoridades israelíes, varios misiles impactaron contra edificaciones residenciales en Tel Aviv, provocando fuego, humo visible en el cielo y al menos 15 heridos atendidos en hospitales locales. En Rishon LeZion, otro misil causó daños en viviendas y dejó al menos dos personas fallecidas y 19 heridas. La defensiva antiaérea, que también contó con apoyo de sistemas estadounidenses, logró interceptar la mayoría de los ataques.
En Teherán, las autoridades activaron defensas aéreas contra posibles contraataques israelíes y el liderazgo iraní reiteró su advertencia de continuar con la ofensiva, al tiempo que EE.UU. colaboraba con Israel para demolición de misiles. La ofensiva ha elevado los niveles de tensión en la región, con temor a una escalada militar mayor y repercusiones en el tráfico aéreo, precios del petróleo y estabilidad regional.
Con este nuevo intercambio bélico, el conflicto entre Irán e Israel ha derivado en un enfrentamiento directo sin precedentes, poniendo a prueba la capacidad de defensa de Israel y aumentando el riesgo de una guerra a gran escala en Oriente Medio.
Fuente: BBC